“Mi equipo desarrolló sistema que comunica a Stephen Hawking”

Conoce al peruano que desarrolla en Silicon Valley la tecnología que usaremos dentro de diez años

Omar Flórez trabaja en los laboratorios de Intel.

Omar Flórez trabaja en los laboratorios de Intel. Eso quiere decir que lo hace con tecnología que usaremos dentro de diez años. También integra el mismo equipo que hace poco arregló la forma en que el físico Stephen Hawking se comunica con el mundo.

Flórez lleva años viviendo en Estados Unidos, a donde llegó soñando con trabajar en un gigante tecnológico.

—¿Qué hace un peruano en Silicon Valley?
Soy investigador científico en Intel Labs, que se enfoca en desarrollar innovación y producir tecnología nueva. La empresa necesita gente que explore, investigue, e implemente ideas que todavía no existen en el mercado.

—¿Qué investigas?
Lo que hago está relacionado a la inteligencia artifi cial: enseñarle a las computadoras a predecir cuándo y por qué una persona estará interesada en realizar una actividad. Mi sueño es que algún día nuestros autos o celulares sean tan inteligentes que entiendan, por ejemplo, por qué no dormimos bien la noche anterior.

—¿Cómo llegaste ahí?
Estudié Computación de la UNSA y tenía ganas inmensas de desarrollar ciencia, pero no sabía cómo ni por dónde empezar. Quería hacer una silla de ruedas que se active con voz y que sea como un asistente para las personas con problemas de desplazamiento. Desarrollé el sistema de voz, pero nunca pude unirlo a un dispositivo mecánico.

—¿Entonces?
Afortunadamente hubo varias huelgas ese año, lo cual me dio unos tres meses de tiempo libre para organizar mis ideas. Así empecé a hacer investigación en el Perú y viajaba para exponer mis resultados en otros países.

—Hasta que te llamaron para estudiar allá...
Acepté una beca para estudiar un doctorado en Ciencia de la Computación en la Universidad Estatal de Utah. Después de trabajar en IBM Research, me establecí como investigador en Intel. Me pregunto si mi viaje hubiera sido el mismo sin esas huelgas...

—¿Trabajas con el mismo equipo que arregló el sistema que Stephen Hawking usa para comunicarse?
Mi equipo desarrolló los algoritmos de predicción de texto y del sensor infrarrojo que le permiten comunicarse diariamente. Este sensor sirve para elegir algo en la pantalla. Dada su enfermedad, su capacidad de comunicarse había caído a una palabra por minuto, así que el reto de la empresa fue hacer que Stephen
Hawking nos hable nuevamente.

—No fuiste tú el que puso que Hawking estaba en San Juan de Lurigancho, ¿no?
[Risas] No fui yo, aunque me hubiera gustado hacerlo. Mis felicitaciones a quien se le ocurrió, pero quizás fue solo un error de uno de sus asistentes en Cambridge. Ojalá algún día este genio visite el Perú.